Honda es una ciudad históricamente ilustre, cuna de colombianos celebérrimos y núcleo de una importante región del centro del país.
8 de diciembre de 2016
Se parece a Cartagena y a Monpóx, a Popayán y a Villa de Leyva. Con la ventaja adicional de que fue, durante casi dos siglos, el más próspero centro de actividades empresariales de todo orden en Colombia. Alfonso López, el viejo, la definió como “un emporio comercial de tradición secular, donde se dio cita la actividad económica de la República en su tráfico de exportación e importación…y a donde venían a surtirse los comerciantes de los cuatro confines del país”. En ese sitio, dijo López, “se abrieron mis ojos asombrados a la inmensa realidad de nuestra patria mestiza, mulata y tropical”.
Honda ha sido estudiada por historiadores como Roberto Velandia y Armando Moreno, por antropólogos como Germán Ferro, por arquitectos como Angela Inés Guzmán y Edgar Eduardo Prieto, por especialistas en diferentes disciplinas y por grupos de estudiantes en trance de graduación de la Universidad Piloto y de otras del país. Tiene además un activo Centro de Historia que dirige el educador Tiberio Murcia Godoy.
Todo eso fue considerado por la ley 1612 de 2013, aprobada en memoria del cofrade Alfonso Palacio Rudas, con motivo del centenario de su nacimiento. Un grupo de dirigentes tolimenses –ex gobernadores, ex parlamentarios, dirigentes cívicos y del sector privado- se comprometió con la idea de redactar un proyecto de ley y con la defensa de Honda como un patrimonio digno de conservación y recuperación. Dicho grupo pidió al ex presidente Ernesto Samper, cuyas estirpes hunden sus raíces en Honda, liderar el proceso y al presidente Santos presentar el proyecto al Congreso. Ambos cumplieron gustosos su compromiso. El impulso de la representación tolimense y la acogida de la mayoría parlamentaria lo convirtieron en ley de la república.
En estos casos suele suceder que algunos de los mandatos legales se cumplen, pero otros se descuidan. Por tal motivo la dirigencia hondana envió una carta al presidente Santos en la cual pide que el ministerio de Cultura y el Banco de la República rescaten el “Teatro Honda”, antes de que su creciente deterioro dificulte más su recuperación. El teatro sería eje de desarrollos culturales en toda una región que tiene a Honda como punto de inflexión entre el alto Magdalena y el Magdalena medio, pero también como núcleo geográfico natural con interrelaciones históricas, turísticas y comerciales frente a municipios situados en cuatro departamentos: Puerto Salgar y Guaduas en Cundinamarca, Mariquita, Lérida, Ambalema, Líbano, Fresno en el Tolima, La Dorada y Victoria en Caldas e incluso Puerto Boyacá.
El gobernador del Tolima y el alcalde de Honda se han comprometido a liderar los procesos de restauración que estén a su alcance. Los directivos de la Cámara de Comercio, del Museo del Río, del Museo Alfonso López, de la biblioteca del Banco de la República, de los sectores hotelero, educativo y cultural se dirigieron al presidente Santos, a la Junta Directiva del Banco de la República, a la ministra de Cultura para presionar la adquisición y restauración del Teatro Honda, como lo ordena el artículo 8º de la mencionada ley. Durante casi ciento cincuenta años Honda tuvo importantes teatros que dieron albergue a distintas expresiones de la cultura. A comienzos del siglo xx era célebre el Teatro Unión, que se destruyó por cuenta de un incendio del cual hablan todavía los hondanos. Empresarios como Emilio Urrea Giraldo, Hernando Parra Casas, Temístocles Amaya, entre otros bien conocidos en el medio, conformaron una sociedad anónima para construir el Teatro Honda –inmueble que hoy pertenece a la familia Cuartas- con el objeto de mantener vigente la actividad artística y cultural.
Las instalaciones del teatro se encuentran en buen estado a pesar de llevar clausurado varias décadas. Es preciso acometer un proceso de recuperación. El maestro César Augusto Zambrano, director de la Orquesta de Cámara de la Universidad del Tolima e hijo de un patricio de Honda, tiene propuestas que la dirigencia hondana respalda. Jaime Galindo Saavedra, William Calderón Perdomo, Elsa Laverde Polanco, Hernán Rodríguez Castro, Hernando Caldas Navarro, entre muchos otros suscriben la referida carta, encabezada por el alcalde Juan Guillermo Beltrán, y el ex gobernador Néstor Hernando Parra, también oriundo de Honda y residente en España,quien acompaña desde la madre patria el suceso que se cumple en su patria chica. Yo quiero sumarme a las peticiones de los dirigentes de Honda. La recuperación de su teatro, recupera también parte de su historia ilustre –una de las más ilustres del país- y de su rico suceso cultural.
.Tomado de:http://www.elespectador.com/opinion/historia-nacional-y-cultura-regional