Tras la emergencia de la última semana en la ribera del río Magdalena, varios mandatarios coinciden en que este episodio, que tiene a decenas de personas durmiendo en carpas, no obedece del todo a la temporada de lluvias.
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.Algunos habitantes y mandatarios consideran que la apertura de las compuertas de la represa de Betania en el Huila puso la cuota mayor de las inundaciones que dejan hoy a Ambalema y Honda con centenares de familias afectadas.
Pero esta no sería la primera vez de un capítulo similar, pues hace seis años los residentes de los barrios Juanamoya, de Ambalema, y Pachomario, en Honda, tuvieron que huir de la creciente del río Magdalena, y aunque en esa época se desarrollaron censos para iniciar programas de reubicación en el caso del municipio de las ‘Mil y una columnas’, el proyecto hasta la fecha no ha iniciado.
Joselito Primo, un hombre de edad avanzada y que ha vivido toda su vida en Ambalema, recordó que al igual que en 2011, la fuerza del cauce del río Magdalena arrasó con viviendas y cultivos, de la misma forma que pasó el martes anterior.
Lo mismo le sucedió a Luis Vicente Otao Mosquera, quien relató que luego de la inundación optó por llevar a su esposa y sus tres hijos a un albergue mientras que él se quedó con el agua a la cintura de guardia, cuidando las pertenencias que no alcanzó a sacar.
Por la corriente del río “bajaban palos y ramas, de todo, y tuve que sacar en canoa la mayoría de las cosas, además se me ahogaron 15 gallinas ponedoras y nueve pollos”, narró Otao.
Por su parte, el alcalde de Ambalema, Juan Carlos Chavarro, indicó que la inundación también llegó a la vereda Playa Verde parte Baja, del sector Beltrancito: el agua arrasó con cultivos de arroz, plátano y sábila.
A las cifras se suman los estragos que causaron los ríos Recio y Lagunilla.
“Esta creciente, al igual que la que pasó en 2011, fue por la apertura de compuertas de los embalses. Normalmente cuando hay apertura en época de invierno, en los sectores de Juanamoya y Playa Verde, hay unos enrocados que amortiguan el crecimiento del agua y no permiten el paso.
“Pero la apertura de compuertas sumado a la lluvia, automáticamente sobrepasan los niveles”, precisó el alcalde Chavarro.
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Pérdida total
Horas después de que se procedió a dar el cierre de las compuertas de la represa el nivel del agua empezó a ceder, lo que permitió conocer con claridad las consecuencias que dejó la creciente en barrios como Pachomario, La Magdalena y Panchigua, en Honda.
En el caso de Ferney Vargas, residente de La Magdalena, la fuerza del agua derribó por segunda vez su vivienda, “el agua se metió y se llevó todas las paredes, los colchones, no alcancé a sacar las cosas. La creciente se vino de repente y no nos dio tiempo de sacar nada”, narró el damnificado.
Desde ese instante, él y su familia están alojados en unas carpas que instaló la Administración municipal en las calles.
Ahora le preocupa que las carpas serán levantadas, ya que, según la Alcaldía, varias de las casas pueden volver a ser habitadas mientras que los que perdieron sus viviendas tendrían dos opciones: pagar un arriendo o refugiarse donde familiares.
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Acciones jurídicas para fijar un precedente
Tanto el mandatario de Honda, Juan Guillermo Beltrán, como el de Ambalema atribuyen la emergencia de la última semana a la apertura de las compuertas de la represa Betania.
El día que lo hicieron, “teníamos 60 afectados, después de que abrieron compuertas, pasamos a 550 damnificados y un total de 800 personas afectadas de ola invernal, en 14 barrios. También tuvimos que armar 17 hangares y a eso se le suman las pérdidas materiales.
“Hay viviendas que ya no se pueden volver a habitar en la ribera del río y tenemos dos vías: la de Pachomario y Caracolí, y lo más grave es que nadie nos responde”, dijo Beltrán.
El mandatario hace referencia a que la empresa Emgesa, operadora de Betania, hasta el momento no se ha manifestado sobre los daños derivados de su actividad económica o de las medidas de compensación establecidas.
Ante el panorama, la decisión de Beltrán es emprender un proceso jurídico en contra de la hidroeléctrica.
“Anunciamos al Gobernador (del Tolima) y al Consejo Departamental de Gestión del Riesgo que vamos a iniciar una acción judicial, pues tenemos las pruebas suficientes (para demostrar) que municipios como Honda y Flandes no fueron afectados por ola invernal (sino que), fueron afectados por el ejercicio de la generación de energía de Betania a través de su empresa Emgesa, que a su vez pertenece al grupo español Enel y la Empresa de Energía de Bogotá.
La acción jurídica también alcanzaría de manera subsidiaria a la CAR de Huila, teniendo en cuenta que fue esta entidad la que entregó la licencia ambiental y, según Beltrán, no tuvieron en cuenta las medidas de compensación por el ejercicio de la actividad económica de generar energía.
De esta forma también se busca llamar la atención al Gobierno nacional, especialmente del Ministerio de Minas y Energía: “Quisiera preguntar al Ministro de Minas, en estos casos, quién responde, pues el único acompañamiento institucional es el del Departamento.
“No es justo que el Municipio tenga que sacrificar inversiones para todos los hondanos, para atender los estragos que dejó la apertura de compuertas de Betania”, precisó el burgomaestre.
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Donde come uno comen dos
A mitad de varias calles de Honda se instalaron varias carpas para que los damnificados se refugiaran, y según datos oficiales, durante los últimos días se alimentó a cerca de mil personas en total.
Uno de esos puntos de alimentación improvisados se instaló en la calle conocida como la Avenida de Los Estudiantes: allí Mariela Herrera Rivera, junto a seis personas, se han dedicado durante los últimos días a cocinar a más de cien personas.
La mujer contó que como la ayuda recibida se quedó corta ante la necesidad de los comensales, los encargados de la cocina optaron por pedir el apoyo de los comerciantes del Municipio.
Dato
Tras la experiencia tenida con la represa de Betania, la preocupación se centra con la apertura de El Quimbo.
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Tomado de;
http://www.elnuevodia.com.co/nuevodia/tolima/regional/317540-apertura-de-la-compuerta-de-betania-dejo-damnificados-alcalde-de-honda
1 comentario:
Expreso mi respeto y consideración por las personas y las familias que resultaron afectadas por esta "creciente" en Honda y en otros municipios de la cuenca. Ahí en Honda pareciera que no hemos aprendido (si no aprendemos no comprendemos) de las experiencias anteriores similares. Es importante hacer con estas personas y la administración local algunos ejercicios de recuperación crítica de estas experiencias (2011 y 2017 juntas), sistematizar los resultados y convertirlos en conocimientos. Con base en esto se podría aproximar un plan (léase bien, un plan) de largo plazo (no inmediatista como es la costumbre) para aplicar soluciones integrales (responsabilidades compartidas) viables y confiables definitivas al problema. Las dos represas de Betania y El Quimbo no van a cerrar las operaciones y siempre abrirán las compuertas, aunque tengan que responder por los daños causados, si es que responden. No hay que seguir "poniendo la totuma", es una práctica indignante y no soluciona el asunto, solo mitiga algunas consecuencias inmediatas. Vale la pena decir que "a quejarnos al mono de la pila, pero la pila ya no está y el mono se fue", como quien dice "nos fregamos". Tampoco es decir "como dicen por ahí, deje así". No hay que repetir los errores, la gente se acostumbrará a su calidad de damnificada y no hará nada para cambiar o modificar esta situación. Nuestro río tiene su dinámica natural y fue primero que las persons que lo "habitan", es incambiable, pareciera que en Honda tienen río Magdalena, pero no conocen ni comprenden al río Magdalena, esto sería una contradicción, una frustración y otra calamidad. Deseo mejores situaciones para las personas y las familias de su cuenca.
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