Y la plaza de toros San Fernando, en Honda “se desplomo como un naipe” Por Tiberio Murcia Godoy*

 

Se desploma la plaza San Fernando en Honda

(Fotografía periódico El Espacio domingo 19 de 1989)

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Era un sábado de Carnaval, y carnaval de la Subienda que se respete, tenía su plaza de toros, así se hacían las fiesta en Honda, desde 1962, cuando Pepe Cáceres, en una plaza improvisada en Santa Lucia, toreaba, como de los mejores, en su tierra, y por su gente. 

Por eso la administración municipal, en cabeza de su burgomaestre David Hughes, primer alcalde popular de Honda, rendía homenaje a este ídolo del toreo de Colombia y el mundo. 

Cartel de la corrida de toros de ese fin de semana

(Foto Laura Inés Martínez Murcia. febrero 17 de 2021)

Aprovechándose las fiestas de carnaval, y dándose inicio simultáneamente con el festival del río, se llevaría a cabo en la plaza San Fernando, una corrida de toros más, de las muchas que cada año se llevaban a cabo durante sus carnavales. La plaza estaba a reventar, no le caía un alma más. Se esperaba una corrida apoteósica.

Corrida de toros sábado 18 de febrero de 1989

(Foto Carlos Bocanegra.  Archivo TMG)

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Quien escribe estas líneas, ocupaba el cargo de inspector de precios pesas y medidas, y aprovechó la presencia del alcalde, quien iba acompañado del líder político tolimense Alberto Santofimio Botero, para ingresar junto con ellos. Pero el veterano político se abstuvo de ingresar a la plaza, la cual estaba atiborrada hasta las banderas. Santofimio un político veterano, acostumbrado a las multitudes, no ingreso, se disculpo del alcalde, y se retiró. 

Mientras el publico se divertía viendo rejonear a Dairo Chica, el ole iba, y el ole venia. Hasta la famosa ola hicieron los asistentes, ola que se observó maravillosamente.

Corrida de toros sábado 18 de febrero de 1989

(Foto Carlos Bocanegra.  Archivo TMG)

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.Estaban en esas cuando, cuando de un momento a otro la plaza “se desplomaba como un naipe”. Lo que en unos minutos era alegría, con el desplome, se había convertido en tragedia. Acrecentándose el temor del público que yacía en el suelo, era que los toros le embistieran y les causara la muerte, o los hiriera. 

Llanto, desesperación y pánico, era lo que había en ese momento. Algunas personas quisieron golpear al alcalde, culpándole de la tragedia, como si el hubiese armado la plaza. 

El cartel de invitación dice.

Viernes 17 festival taurino nocturno

Sábado 18  5 poderosos toros de casta a muerte para el mano a mano Enrique Calvo El Cali y Jairo Antonio. Espada de reserva Reynaldo Belcastro. 1 Un toro para el rejoneador manizalita Arlex  Torres.

El saldo ese día, sábado 18 de febrero de 1989, fue de 7 muertos y 307 heridos. En una corrida en homenaje al Maestro José Humberto Eslava Cáceres, “Pepe Cáceres”. De la alegría a la tristeza, del jolgorio a la muerte.

Fotos

Periódico El Espacio y Carlos Bocanegra. Laura Ines Martinez Murcia

 

*Miembro del Centro de Historia de Honda. Miembro de Redhicol (Red de historiadores de Colombia). Docente Investigador IED Puerto Bogotá, Guaduas 

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Impresiones en el Facebook

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• Maria Patricia Urrea Amezquita

  Que buena historia

  

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  •  · 9 h
• Alba Marina Rubiano

  Que triste recuerdo!. Gracias a Dios tenemos vida .

  

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  •  · 9 h
  • • • • Chiqui Polanco Polanco

          Que susto pasamos, muy triste pero recordar es vivir 

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          •  · 8 h
        • Avila Barros Gabriel Armando

          Buenos días querido amigo, felicidades por tu labor en informarnos de los hechos históricos de mi pueblo, gracias por mostrar el hecho de ese día , doloroso para las familias que perdiendo sus seres queridos, pero es importante recordar un. hecho así de nuestro pueblo•
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        • Juan Pava

          Trágica tarde, grupo musical no recuerdo cual cantan a en el club de tiro.
        • Anamatilde Pulido R

          Tambien presencie este episodio gracias a Dios sin novedad
        • Orlando Cortes Rios

          Yo estaba en esa plaza con mi esposa gracias a Dios cuando se desplomó no sufrimos si no laceraciones leves y sangrado en la nariz del golpe pero aquí lo estamos contando.Que recuerdos.un abrazo historiador Tiberio.
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